- Prepara tu piel: Asegúrate de que tu piel esté limpia e hidratada antes de aplicar el iluminador para un acabado más natural y uniforme.
Se aplica con delicadeza…
- Con los dedos: Toma una pequeña cantidad del iluminador con la yema de tu dedo y aplícalo dando toquecitos suaves en las áreas que quieras destacar (pómulos, puente de la nariz, arco de Cupido, debajo de las cejas).
- Con una brocha: Usa una brocha pequeña y suave para difuminar el producto, logrando un efecto más ligero y preciso.
- Difumina: Integra bien el iluminador en la piel para un acabado sutil y sin líneas marcadas. Puedes construir el brillo poco a poco según la intensidad que desees.
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